Me basto yo sola para partirme en dos,
agradezco tu incondicional ayuda y las paladas de orgullo con que me alientas,
los pedazos de ti que me dejas por las esquinas
para que los recoja uno a uno y me empeñe en unirlos
por si ese amasijo pudiera, en algún momento de esos que prodigas tan poco,
tener aspecto de sentimiento.
El color de tus pupilas te delata
cuando desatas la jauria de furias que te sujetan.
El rictus de tu boca contraida y las palabras que tragas por no escupirlas,
producen el efecto que deseas:
partirme en dos una y mil veces como si fuera divisible hasta el infinito,
insisto en ello hasta que la neura aparece.
Es gracioso por tu parte pero siento decirte que solo consigues que te quiera mas
y que te hagas más fuerte en todos y cada uno de mis pedazos!!!!