Libertad

Amina salió con el revuelo de sus pasos por el pasillo, apurando los rincones de aquella inmensa largura que no acaba nunca. Alcanzó a girar la llave y abrió la puerta y sin mirar atrás dejó que su cabeza la guiara fuera de aquella sofocante atmosfera en la que se había convertido su casa.
Mi casa, pensó y estiró su boca en lo que quería ser una sonrisa, más bien un rictus.., sin equipaje, solo con su eterna mochila en la que llevaba lo imprescindible: una botella de agua, un móvil del que había borrado todos los números menos uno (ese que se habia aprendido de memoria) y una caja de libertad por si se decidía, libertad en 30 capsulas "'para cuando no aguantes más", le habian dicho!!!

Salió a la calle, dejando su coche en el garage, las llaves puestas.- ya no le importaba que se lo llevaran, pues hasta eso, que era sagrado para ella, lo habia compartido con entusiasmo...., no volvió la espalda, no miró hacia atrás.... anduvo hacia adelante donde solo veía cielo y montañas.

Cuando paró supo que habia llegado, se sentó, vació su mochila a su alrededor: cogió aquella foto, recordó unos segundos aquellos momentos y decidió hacer uso de su libertad, solo que esta vez, la quería toda y una a una se la fue tragando..... y cerró los ojos con el recuerdo de aquella sonrisa, aquellos ojos y aquellas manos que la habían subido a las estrellas y voló con ellas hasta dejarse ir!